viernes, 4 de enero de 2008


Todos los que hemos vivido buscando la verdad, nos hemos encontrado en el camino con muchas ideas que nos sedujeron y habitaron en nosotros con la fuerza suficiente como condicionar nuestro sistema de creencias.


Sin embargo, pasado un tiempo, muchas de las verdades terminaban siendo descartadas porque no soportaban nuestros cuestionamientos internos, o porque una "nueva verdad", incompatible con aquellas, competía en nosotros por los mismos espacios. O simplemente porque estas verdades dejaban de serlo.


En cualquier caso, aquellos conceptos que habiamos tenido como referntes dejaban de ser tales y nos encontrabamos, de pronto, a la deriva. Dueños del timon de nuestro barco y conscientes de nuestras posibilidades, pero incapaces de trazar un rumbo confiable.


Entonces me pregunto, por un lado: ¿Existiran las verdades sólidas como rocas e imperturbables como accidentes geográficos? ¿O será la verdad solo un concepto que lleva en si mismo la esencia de lo transitorio y frágil de las flores?




Algunas verdades que seguramente son cuestionables para otros, lo serán también para mi, algún día. Pero hoy contienen, me parece, la solidez y la confiabilidad que da la indiscutible mirada del sentido común.


I.- El primero de estos pensamientos es la idea de saber que


lo que es, es.


El concepto, no por obvio menos ignarado, contiene en si mismo tres implicaciones que me parece significativo remarcar: saber que "lo que es, es" implica la aceptacion de que los hechos, las cosas, las situaciones son como son.




La realidad no es como a mi me convendria que fuera.


No es como deberia ser.


No es como me dijeron que iba a ser.


No es como fue.


No es como sera mañana.


La realidad de mi afuera es como es.




la segunda derivacion directamente relacionada con esta idea es que


yo soy quien soy.




Yo no soy quien quisiera der


No soy el que deberia ser.


No soy quien mi mamá queria que fuese.


Ni siquiera soy la que fui.


Yo soy quien soy.




Y si es dificil aceptar que yo soy quien soy, cuanto mas dificil nos es, a veces, aceptar la tercera derivacion del concepto " lo que es, es".


Tú... eres quien eres.




No eres quien yo necesito que seas.


Tú no eres el que fuiste.


Tú no eres como a mi me conviene.


Tú no eres como yo quiero.


Tú eres como eres.




Aceptar eso es respetarte y no pedirte que cambien.


Hace poco empece a definir el verdadero amor como la desinteresada tarea de crear espacio para que el otro sea quien es. Esta primera verdad esel principio de toda relacion adulta.




II.- La segunda verdad que creo imprescindible es:


Nada que sea bueno es gratis




Y de aqui se derivan, por lo menos dos ideas.


La primera:


Si deseo algo qeu es bueno para mi, deberia saber que voy a pagar un precio por ello. Por supuesto, ese pago no siempre es en dinero (¡¡seria tan facil!!). Este precio es a veces alto y otras muy pequeño, pero siempre existe. Porque nada que sea bueno es gratis.


La segunda:


Darme cuenta de que si algo recibo de fuera, si algo bueno me esta pasando, si vivo situaciones de placer y de goce es porque me las he ganado. He pagado por ellas, me las merezco




III.- La tercera idea es...


Es cierto que nadie puede hacer siempre todo lo qeu quiere, pero cualquiera puede NO hacer NUNCA lo que NO QUIERE.


Me repito:


NUNCA HACER LO QUE NO QUIERO.








Esto es un fragmento de un libro de Jorge Bucay, pero me parece que son verdades como templos, asi que, aplicaros el cuento. Leedlo, no es demasiado largo y cambiara vuestra forma de ver las cosas.

(No pesariais que me lo he cuajao yo, no tengo bastante tiempo como para pensar tanto. Besos)






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